¡Condenado! Dani Alves es sentenciado a cárcel por violar a una joven en discoteca
Dani Alves fue delarado culpable de violación a una joven que lo señaló como su agresor sexual cuando estaba en una discoteca, el exjugador deberá cumplir con su condena y además tendrá que ser vigilado para que las autoridades se aseguren de que el ex pelotero ya no será más un riesgo para la sociedad.
Lo condenan
La Audiencia Provincial de Barcelona ha condenado a 4 años y 6 meses de cárcel al futbolista Dani Alves por la violación a una joven en la discoteca Sutton de Barcelona la madrugada del 31 de diciembre de 2022.
El tribunal concluyó que las relaciones sexuales no fueron consentidas por la víctima quen demostró con pruebas la veracidad de sus palabras.
Además de la pena de prisión, la Audiencia condena a Alves a 5 años de libertad vigilada tras su salida de la cárcel.
Incluso Alves deberá pagar la suma de 150.000 euros por el daño moral y las lesiones sufridas a la víctima y a una multa total de 9.000 euros por un delito leve de lesiones.
Asimismo, le impiden comunicarse con la denunciantes por cualquier medio y acercarse a ella a menos de 1.000 metros, según informa el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya.
En su sentencia, el tribunal de la Sección 21ª de la Audiencia de Barcelona que "el tribunal considera probado que "el acusado cogió bruscamente a la denunciante, la tiró al suelo y evitando que pudiera moverse la penetró vaginalmente, pese a que la denunciante decía que no, que se quería ir" del baño privado de la discoteca Sutton donde ocurrieron los hechos.
¿Cómo vive en la cárcel?
Después de haberse hecho oficial su sentencia Dani Alve deberá continuar detenido en el centro Brians 2, destinado a presos por delitos de índole sexual.
Dani quedó detenido desde el 20 de enero de 2023 hasta que luego se confirmó que se mantendría en prisión hasta el juicio.
Sin embargo, se reveló como es su estadía en la cárcel, pues está instalado en una celda de uso individual dentro del módulo en el centro penitenciario que está destinado a los presos encarcelados por delitos contra la libertad sexual. Alves no goza de privilegios respecto al resto de los reclusos.
Luego de compartir con otro detenido las primeras semanas de su estadía en Brians 2, luego se quedó solo en su celda.
Esto se debe a que fue elegido para realizar tareas de limpieza y mantenimiento, lo que lo obliga a tener que despertarse en una hora temprana, antes que el resto de los reclusos, por lo que se le permite no compartir su lugar con otros y así no molestar a los otros internos del penal.
Una vez que Alves finaliza sus tareas del día, pasa gran parte de su tiempo haciendo ejercicios físicos en el patio que tiene el módulo donde se encuentra detenido, mismo lugar donde se mantendrá hasta cumplir su pena.