¡Indignante! Mujer exige justicia tras hallar celular oculto en restaurante de San Isidro: "No se callen"
Una visita a un conocido restaurante de San Isidro terminó en una terrible momento para Fiorella, una joven que descubrió una cámara oculta en el baño de mujeres. El hecho ocurrió en el local "Franklin" y, según la afectada, la respuesta del personal dejó mucho que desear.
Joven denuncia acoso en restaurante de San Isidro y exige justicia
Una salida con un amigo terminó en una pesadilla para Fiorella, quien descubrió un celular oculto en el baño de mujeres de un conocido restaurante en San Isidro. Según su relato, el aparato estaba grabando sin que nadie se diera cuenta, y lo más alarmante es que el presunto responsable sería un trabajador del local.
El hallazgo que lo cambió todo. Fiorella contó en "América Hoy" que estaba usando el baño cuando notó algo raro.
"La verdad es que todavía estoy en shock... estoy aquí porque quiero que se haga justicia. Y más que nada, decirle a todos que no se callen, porque no sabemos cuántas personas...", declaró con firmeza.
Entre la tubería y el lavadero encontró un celular en modo video. Como no tenía su teléfono, llamó al número de su amigo, que sabía de memoria, desde el mismo aparato donde la grabaron para pedir ayuda. Además, solicitó que fuera una mujer quien se acercara, pues temía que el agresor estuviera cerca.
"Lo llamé desde el mismo celular que me estaban grabando. Le dije que por favor mandara a una mujer al baño, porque estaba en shock pensando que él podría estar afuera. Entonces llama a la mesera, yo salgo y le digo que llame a su supervisor, una administradora. Ahí es donde el tipo aparece en el baño, afuera, y me empieza a decir que ha sido un error que deja el celular, porque se lava la cara grabándose. Pero había baño de varones y de mujeres", aseguró.
El acusado y su extraña justificación. El señalado sería un mozo identificado como Anderson Romario. Cuando lo confrontaron, intentó justificarse diciendo que solo se lavaba la cara. Sin embargo, la versión no convenció a nadie.
"Cuando encuentro el teléfono estaba debajo del caño y la tubería, escondido... ", narró Fiorella. En las imágenes captadas se aprecia el momento en que el hombre coloca el celular y aparece su rostro.
Valeria Piazza, quien estaba en el set, comentó que la excusa "no tenía sentido" porque había baños separados para hombres y mujeres, y el aparato estaba claramente oculto.
Críticas a la reacción del restaurante
La joven aseguró que el restaurante no actuó con la rapidez necesaria. Pese a que en redes, señalan que ellos llamaron a la Policía, la versión de Fiorella es muy diferente.
"Me sorprende mucho la poca empatía que tuvieron... pedí que llamaran a la policía y no lo hicieron. Yo tuve que buscar en Google la comisaría más cercana. Tengo pruebas de todo", reclamó.
Aún peor, dijo que el acusado tuvo tiempo de cambiarse de ropa y tomar su mochila antes de irse, mientras el local afirmaba en redes que él había "huido".
"Lo dejan que se vaya. La verdad es eso, que lo que hizo el restaurante fue dejarlo ir", agregó Janet Barboza.
Fiorella también aseguró que el presunto acosador tendría antecedentes por agresión a la mujer, algo que, según ella, debería alertar aún más a las autoridades.
El caso de Fiorella sobre el celular oculto en el baño de un restaurante de San Isidro ha encendido la preocupación sobre la seguridad en espacios públicos y el rol de los negocios frente a denuncias de acoso. La joven pidió a todas las mujeres que no se queden calladas. La investigación sigue en curso y se espera que las autoridades actúen con rapidez para esclarecer lo sucedido y sancionar a los responsables.