¡Lamentable! Las recientes inundaciones catastróficas han generado un caos en la ciudad de Nueva Delhi, la capital de India, y han causado devastación en el norte del país. Los desbordamientos de ríos y las fuertes lluvias han dejado un trágico saldo de más de 22 personas fallecidas y miles de afectados.
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Grave situación
Ante esta situación de emergencia, el Gobierno de Nueva Delhi ha tomado medidas urgentes para proteger a la población. Hasta el momento, se ha logrado evacuar a 23.692 residentes de las zonas en riesgo, priorizando la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.
Las vías principales se encuentran sumergidas, lo que ha llevado a los residentes a utilizar botes y nadar para poder desplazarse. La situación es especialmente crítica en las áreas adyacentes al río Yamuna, cuyo nivel de agua continúa tres metros por encima del nivel de peligro.
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Las intensas lluvias han provocado deslizamientos de tierra que han dejado a varias localidades incomunicadas. Además, alrededor de 10.000 turistas se encuentran atrapados en la zona, según informó el jefe de Gobierno local, Sukhvinder Singh, a través de Twitter.
Ante esta situación, las autoridades han llevado a cabo labores de rescate, logrando rescatar a más de 60.000 personas que quedaron varadas. Incluso utilizaron helicópteros del Ejército para estas operaciones.
En el estado de Punjab, también se han registrado intensas lluvias e inundaciones que han resultado en la pérdida de vidas. El ministro de Hacienda regional, Brahm Shankar Jimpa, informó que al menos diez personas han fallecido como consecuencia de estos eventos climáticos.Familias sufren en la India
A medida que el nivel del agua en el río principal de Nueva Delhi continúa aumentando hora tras hora, miles de familias se ven obligadas a empacar algunas de sus pertenencias y abandonar sus hogares.
Las inundaciones y las lluvias están causando estragos en los cultivos de la zona, lo que representa una grave pérdida para las comunidades locales que dependen de ellos como su principal fuente de ingresos. Muchos se ven obligadas a dejar atrás sus hogares y enfrentarse a la incertidumbre de cómo reconstruir sus vidas en medio de esta crisis.
El aumento rápido del caudal del río Yamuna, que es el afluente más largo del sagrado río Ganges, está provocando la evacuación de más de 6.000 personas que están dejando atrás extensas áreas de cultivo. Estos cultivos representan la principal fuente de sustento para miles de familias, pero ahora han quedado sumergidos bajo el agua.En la zona afectada, se encuentran alrededor de 1.200 viviendas que carecen de servicios básicos y electricidad. Cada año, con la llegada de la temporada de monzones, que se extiende de mayo a septiembre, estas familias se ven obligadas a abandonar sus hogares con lo mínimo para salvaguardar sus vidas.
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Esta situación es devastadora para las comunidades locales, ya que pierden no solo sus hogares, sino también sus medios de subsistencia. La pérdida de los cultivos significa una gran desafío económico y social para estas familias, que dependen de ellos para su alimentación y su sustento diario. Además, la falta de servicios básicos agrava aún más la difícil situación en la que se encuentran.
