El 2 de noviembre de 2016, Sherri Papini aparentemente fue secuestrada en Redding (Estados Unidos) por dos mujeres armadas que se la llevaron mientras ella estaba trotando. Luego de 22 días apareció y relató que estuvo encadenada a una cama por sus secuestradoras, pero la historia generó muchas dudas entre los investigadores.
Luego de las pesquisas, la mujer tuvo que confesar que inventó su secuestro y ahora tendrá que pagar una alta suma de dinero como multa, pues varias autoridades gastaron miles de dólares en su búsqueda.
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“En última instancia, la investigación reveló que no hubo secuestro y que el tiempo y los recursos que podrían haberse utilizado para investigar el crimen real, proteger a la comunidad y proporcionar recursos a las víctimas se desperdiciaron en función de la conducta del acusado” afirmó el fiscal federal Phillip A. Talbert en un comunicado publicado por CNN.
Papini aceptó que su secuestro era un engaño y “se declaró culpable de mentir a un oficial federal, también del cargo de fraude postal, así lo dio a conocer su abogado, William Portanova, a medios locales.
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Portanova señaló que la mujer debe pagar una multa de 300 mil dólares, para “restituir a varias entidades gubernamentales”, así lo dio a conocer el medio de comunicación Infobae.
El supuesto secuestro lo hizo junto a un exnovio, quien le contó a las autoridades que le había ayudado para realizar este plan, pues la mujer le comentó que su esposo había abusado de ella.
El exnovio de Sherri Papini también narró que se comunicaron con celulares prepago para evitar ser detectados. Además, el hombre señaló que no tuvo relaciones sexuales con la mujer durante el tiempo que fingió el secuestro.
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