Carlos Álvarez, uno de los humoristas más queridos del Perú, sorprendió al revelar que su famosa imitación de 'Paolín lin lin', inspirada en Paolo Guerrero, le trajo más de un problema. Durante una charla, el imitador contó que Doña Peta, la madre del futbolista, no estaba muy contenta con la parodia de su hijo y no dudó en hacérselo saber.
El humor que incomodó a Doña Peta
Carlos Álvarez, reconocido comediante peruano, recordó en una entrevista cómo su famosa imitación de 'Paolín lin lin' le causó algunos problemas, no solo con Paolo Guerrero, sino también con Doña Peta, la madre del futbolista.
Durante su participación en el podcast 'Café con la Chévez', Álvarez habló sobre su larga trayectoria en el humor y cómo ha tenido que enfrentar ciertos inconvenientes a lo largo de su carrera, siendo uno de ellos su parodia del futbolista peruano.
"La de 'Paolín lin lin' me trajo un jalón de orejas de Doña Peta y de él también", confesó. A pesar de que al principio Guerrero y su madre no tomaron bien la parodia, con el tiempo lograron entenderse mejor. "Después de eso ya nos entendimos un poco, pero bien", comentó el comediante, dejando en claro que no hubo mayores conflictos.
Álvarez, fiel a su estilo, defendió su trabajo como humorista y recalcó que las personas deben tener "correa ancha" cuando se trata de bromas y parodias.
"Yo creo que no hay que perder la correa", aseguró. Aunque reconoció que Paolo Guerrero al inicio se mostró algo sensible con las imitaciones, destacó que es parte del trabajo de un comediante llevar situaciones al extremo. " Bueno, quedó demostrado que es muy engreído, la gente tiene esa percepción. Y eso es lo que hace el humorista es parodiar, satirizar y llevar las cosas un poco más allá", explicó.
Los inicios de Carlos Álvarez
Durante la entrevista, Carlos también recordó cómo comenzó su carrera en el mundo del humor. Contó que a los 19 años, después de terminar su servicio militar en la Marina de Guerra, tuvo la oportunidad de participar en el programa 'Trampolín a la Fama' de Augusto Ferrando.
"Salía de la Marina de Guerra, había estado un año de servicio militar. Se presentó este tema con Augusto Ferrando y mira, han pasado ya 41 años de eso", comentó con orgullo.
Su participación en ese programa fue un éxito, tanto que apenas terminó su presentación, ya había gente esperando para ofrecerle trabajo.
"Ni bien salí del canal, ya estaba Tulio Loza en la puerta para darme trabajo", recordó. Este fue solo el inicio de una carrera que lo llevaría a convertirse en uno de los imitadores más importantes del país.
A lo largo de su carrera, Carlos Álvarez ha sabido ganarse el cariño del público con sus divertidas imitaciones. Desde políticos hasta figuras deportivas, sus personajes han dejado huella en la televisión peruana.
Aunque admite que no todos reciben con agrado sus parodias, asegura que el humor es su forma de devolver un poco de alegría al mundo. "Siempre he creído que imitar es un don, es un regalo que me dio Dios", dijo con humildad.
A pesar de algunos momentos difíciles, como el "jalón de orejas" de Doña Peta, Carlos Álvarez continúa disfrutando de su trabajo y haciendo reír a miles de peruanos con su talento para la comedia.