Después de un largo año de trabajo, a cualquiera se le pueden antojar unas buenas vacaciones, incluyendo a los jefe. Y aunque estas personas suelen ser vistas como “malas” y “egoístas”, la verdad es que no siempre es así, ya que algunos han demostrado que realmente piensan en sus empleados.
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La llegada de fin de año es sinónimo de Navidad y celebración, aunque a veces desearíamos que el tiempo para dedicarnos a ello fuera más largo, y Ken Griffin se encargó de que fuera así para su empresa.
Ken Griffin es el CEO y fundador de la empresa de servicios financieros Citadel, la cual tuvo un año bastante fructífero y Griffin no quiso agradecérselo a sus trabajadores con las manos vacías.
El jefe multimillonario de 54 años ideó lo que serían unas vacaciones para sus 10.000 empleados, así que sacó dinero de su bolsillo para invitarlos a todos al parque de diversiones Walt Disney World de Florida (Estados Unidos).
El mejor jefe
Griffin pagó todos los gastos de los 10.000 empleados para que vayan con sus familias al parque y disfruten de la estadía de 3 días.
Se sabe que Griffin pagó los pasajes aéreos desde Nueva York, Houston, París, Zúrich y otras ciudades, es decir provenientes del mismo Estados Unidos, Francia y Suiza. Además, financió los hoteles, las entradas al parque y las comidas, las cuales iban desde chuletas de cordero, sushi y paella.
Todo para que los empleados de Citadel disfrutaran de forma exclusiva el mundo mágico de Walt Disney World junto a sus familias, además pagó para que la banda Coldplay y la cantante Carly Rae Jepsen tocaran junto al DJ Diplo.
