El currículum fue visto por una pasajera del taxi quien lo subió a LinkedIn. Con esa ayuda, Nazarena Ledezma, estudiante de Derecho de 23 años, fue contactada por varias personas para entrevistas de trabajo.
Para algunas personas el apoyo de la familia suele ser fundamental y un pilar principal para las actividades que desean hacer, como por ejemplo estudiar, buscar trabajo o desenvolverse en algún oficio.
Y es que muchas veces hay jóvenes que sin el soporte de sus padres les habría sido más difícil lograr sus sueños. Un caso como este fue el de Nazarena Ledezma, una joven estudiante argentina de 23 años cuyo apoyo de su padre fue fundamental para encontrar trabajo.
Pero según información, esta ayuda vino de una forma poco convencional: su padre imprimió su currículum y lo pegó en la parte posterior de su taxi, para que así los pasajeros que se subían a él lo pudieran leer.
Hecho viral en las redes
El hecho fue dado a conocer por la usuaria de LinkedIn, Mia Raffaella da Costa Piazza, quien subió una foto a su perfil para que el CV de Nazarena pudiera tener más exposición. “Hoy me subí a un taxi y me encontré con esto: un padre tratando de ayudar a su hija. Por cosas como estas los argentinos seguimos saliendo adelante“, escribió la usuaria.
Según el cartel que colgó su papá, Nazarena es estudiante de Derecho de la Universidad Nacional de La Matanza con la mayoría de sus materias aprobadas al día y también con su pasantía ya aprobada.
La imagen que publicó Mia se hizo viral de inmediato y los usuarios de LinkedIn no solo le comentaron sus buenos deseos en la publicación, sino que también recibió varias ofertas laborales y entrevistas de trabajo.
La ayuda de su padre al final logró dar frutos y su hija podrá optar a alguno de esos empleos. Además, la joven se dio el tiemp ode agradecerle a Mia por el gesto de haber subido la foto a redes sociales.
“No quería dejar de agradecerte el hecho de que hayas tomado el tiempo de sacarle foto y publicarlo. Me ayudó muchísimo, me hablaron varias personas y tengo un par de entrevistas pactadas. ¡Gracias!“, cerró Nazarena.