Tras perder a su perrito, una mujer le hizo un homenaje de la manera más dulce posible. Durante poco más de seis años, Anna Halcin compartió con Sebastián, su amada mascota quien fue su fiel compañero, cómplice de travesuras y el mejor amigo cuando sus días no transcurrían de la mejor manera.
Y es que si algo caracterizaba al perrito, es que tenía la habilidad para hacer de lo normal algo realmente increíble y consolarla cuando ninguna caricia humana estuvo para alentarla seguir adelante.
Halcin y su perrito tenían una conexión especial, fue su apoyo emocional y siempre estuvo presente cuando tenía algún altibajo. Sebastián buscaba la manera de hacerla sonreír y animarla.
Lamentablemente, falleció dejando un gran vacío en la mujer, desconsolada y extrañándolo desde que partió de esta tierra y cruzó el arcoíris. Halcin decidió hacer algo especial para llevarlo no solo en su corazón sino sentir su presencia, por lo que se hizo un emotivo tatuaje del perrito en el brazo.
“Era especial para mí, y siempre lo será. Éramos absolutamente mejores amigos”, dijo Halcin.
Su manera de dar amor
Sebastián fue un perrito muy cariñoso, entre las tantas formas que buscaba de trasmitirle todo su amor a su persona favorita, estaba envolver sus adorables patitas alrededor del brazo de Halcin. Al respecto la mujer comentó:
"Le encantaba darme un abrazo en el brazo”.
Decir adiós nunca ha sido fácil, mucho menos a esos adorables ángeles terrenales que hacen nuestra vida mucho mejor. Sin embargo, la vida para los perritos es mucho más corta y aunque no queramos llega el momento de despedirnos.
En medio de su dolor, la mujer quería llevar por siempre a su perrito así que decidió tatuárselo.
“Quería algo que siempre estuviera conmigo, sin importar qué, y un tatuaje parecía perfecto”. Dijo Halcin.
Aunque tenía muchas fotos y momentos inolvidables que vivió con su amada bola de pelos, eligió la pose favorita de Sebastián. De esa manera, podrá sentirlo cerca y contemplarlo a través de un tributo artístico. Al respecto Halcin destacó:
“Ahora, cada vez que miro hacia abajo, es como si me estuviera abrazando. Eso me ayudó a sobrellevarlo un poco”.
Si bien su amada bola de pelos ya no está físicamente, para Halcin sigue estando muy cerca de ella aunque no lo pueda ver.
Si esta triste o en un momento de plena dicha y felicidad, solo basta mirar su brazo y contemplar las patitas que por seis años la acompañaron y la hicieron tan feliz. Desde el cielo aún la hace sonreír y la consuela cuando más lo necesita con solo mirar el tatuaje.
A través de su tatuaje, esta valiente mujer ha logrado reconfortarse y tener la serenidad que tanto necesitaba tras la pérdida de su amada mascota.
Halcin compartió una foto del tatuaje en un grupo de apoyo para personas que perdieron sus peluditos y no pasó mucho tiempo para que su historia se hiciera viral.